REBELION INTESTINAL
(Casi de regreso)

Jueves a medianoche, la hora en que usualmente voy a dormir, todo indicaba una noche normal, pero minutos después de acostarme comenzaron los síntomas de algo que no me iba a dejar dormir esa noche, una fuerte presión en el abdomen bajo que más que dolorosa era desesperantemente molesta, a la mañana siguiente a primera hora con el doctor, el diagnóstico: principio de congestión intestinal severa. Y no es por comer mucho sino por lo que comí, cosas demasiado condimentadas y picantes, cosas muy ricas pero que no alimentan nada y como me dijo el doc mis tripas dijeron simplemente “¡ya basta!”.

Un par de días mas continuaron los síntomas aunque mucho más soportables por los medicamentos, mismos que creo me provocaron una extraña somnolencia pues sentía la necesidad de dormir pero no podía hacerlo, al menos esto era solo durante el día, ahora todo comienza a aproximarse a la normalidad pero la somnolencia ha sido reemplazada por una extraña sensación de... es difícil describirla, digamos que es como si todo a mi alrededor transcurriera a cámara lenta.

Bien dice el dicho que nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido, cuando gozamos de plena salud simplemente no la tomamos en cuenta y nos la pasamos quejando de cualquier otra cosa de nuestra rutinaria vida, pero cuando la salud se quebranta entonces ésa monotonía de la vida rutinaria se ve más atractiva que nunca.

BLOGYEURISMO

Sin duda todos tenemos un poco de voyeuristas, en mayor o menor intensidad sentimos curiosidad por atisbar en lo privado o lo prohibido, no hay que visitar muchos blogs para darse cuenta que la gran mayoría son ventanas abiertas a la vida de otras personas, esto sin duda a contribuido a la increíble expansión de estas páginas personales, aunque claro que por el otro lado están los que en los blogs han (hemos) encontrado el medio para expresarse.

Pero... ¿por qué escribir? Hay quienes lo hacen para desahogarse, para buscar opiniones o soluciones a sus problemas, para compartir lo cotidiano o inusual, para buscar aceptación a sus ideas o sentimientos, para evadir la soledad, para alimentar su ego al recibir elogios a sus escritos, para buscar amigos, y claro que no pueden faltar los “iluminados” que nos muestran su irrefutable verdad, en fin hay tantos motivos como personas escribiéndolos, pero todas las páginas nos muestran un poco o mucho de las vidas ajenas, tanto como quien lo escribe desee mostrarse, así que los blogs nos dan una ventana a otras intimidades.

¿Y yo por qué escribo? Pensándolo bien aún no lo tengo muy claro, de hecho inicialmente este blog era un experimento, una prueba para ver como funcionaba y si podría servir para un proyecto que hace tiempo tengo en mente, crear una página para compartir mi hobby de fotografía de aviación, pero al comenzar a escribir y recibir comentarios me he encontrado con gente realmente interesante e incluso hay con quienes me he sentido muy identificado, y no puedo negar que mi ego se ha visto recompensado al ver que lo que escribo atrae a visitantes, ahora ya no puedo dejar este intento de experimento que se ha convertido ya en parte importante de mi rutina y claro que da una gran satisfacción ver lo que uno puede hacer cuando creía que era algo inaccesible para quien no tiene mucha idea en lo referente a la creación de una página en la red como yo, aunque a ojos extraños pueda parecerles algo banal.

Así pues, ¿por qué escribo? Quiero pensar que lo hago simplemente para compartir.

¿Y tú por qué escribes?

LECCIÓN DE VIDA

Ayer por la tarde caminaba por la Colonia Roma rumbo a casa cuando a la distancia y caminando hacia mí veo a esta alta y atractiva mujer con su hijo de unos dos años en su carriola, lo primero que pensé fue: “que niño tan consentido, ya está grande para que lo sigan paseando en su carrito.” Y me doy cuenta de algo curioso, la mamá llevaba el carrito de un lado al otro de la banqueta y el niño extendía sus brazos hacia los lados, creía que era un juego pero al pasar a su lado descubrí algo realmente maravilloso.

El niño era ciego de nacimiento, con la cuenca de los ojos hundidas, y al llevarlo de un lado al otro la mamá le decía “izquierda”, “derecha”, y según la indicación el niño extendía sus brazos, esto lo hacía al pasar junto algún objeto y lo acercaba para que el niño lo pudiera tocar, en ese momento la mamá nombraba el objeto con que el niño hacía contacto; “maceta”, “hojas”, “mesa”, “mantel”, “silla”... ¡la madre le mostraba a su hijo ciego el mundo que le rodea! Y lo hacía con tanto cariño que la escena era realmente conmovedora. Si alguien pregunta qué es el amor... ¡Es esto! La incondicional entrega a quien uno ama, como esta mujer que con todo su amor trata de mostrarle a su hijo un mundo que él nunca podrá disfrutar con la vista. Lo más maravilloso es que no era una escena triste, al contrario, era algo lleno de amor y alegría por la vida.

Una vez platicando con una amiga nos preguntábamos que haríamos si alguno de nosotros llegara a tener un hijo con alguna discapacidad, sin duda al enterarse uno de la situación sería algo muy doloroso, pero yo volcaría todo mi amor hacia ese ser para evitar el dolor y sobretodo para evitarle cualquier tipo de sufrimiento y nunca hacerlo sentir inferior, al ver a esa mujer recordé esta conversación y me dije que en la misma situación quisiera ser tan valiente como ella, pues esa es la real valentía, y algo muy importante: Nunca ver esto como un “castigo”.

CENIZAS


Los volcanes Popocatépetl e Iztaccihuatl se encuentran a unos 60 kilómetros al oriente de la Ciudad de México, en días claros son visibles desde cualquier parte de la ciudad y con sus cumbres nevadas son un hermoso espectáculo.

El Popocatépetl cuyo nombre en náhuatl significa “montaña que humea”, es un pico volcánico de 5465 metros sobre el nivel del mar, desde la época prehispánica mostraba una ligera actividad que consistía en tenues fumarolas que esporádicamente salían del cráter. A su lado el Iztaccihuatl, de 5230 metros de altitud está totalmente extinto, sus nieves perennes y su conjunto de picos que le dan una curiosa silueta que asemeja a la de una mujer le valieron para que los antiguos mexicanos le pusieran ese nombre que significa “mujer blanca”, aunque popularmente es conocida como “la mujer dormida”. La imagen de estos volcanes estará siempre ligada a los recuerdos de quienes vivimos en esta ciudad.

Pero hace unos siete años, sorpresivamente el Popocatépetl salió de su letargo en forma bastante espectacular con fuertes explosiones, gigantescas columnas de ceniza que desde su cráter alcanzaban casi 5 kilómetros de altura además de arrojar material incandescente por sus laderas, esto provocó alarma entre los pobladores de las comunidades aledañas, muchas de las cuales fueron evacuadas, pero a pesar de la espectacularidad de sus erupciones, hasta el momento el volcán no ha causado daños físicos ni materiales.

Desde entonces el Popocatépetl nos ha acostumbrado a sus grandes fumarolas que periódicamente ascienden desde su cráter, debido a los vientos predominantes pocas veces ésas grandes nubes de ceniza alcanzan a llegar a la Ciudad de México, pero ayer fue uno de esos días; a las 9 de la mañana el volcán exhaló una gran columna de humo y ceniza que se extendió y lentamente avanzó hacia la capital, pasando mediodía la nube cubría la zona sur de la ciudad y comenzaba a precipitarse dando la apariencia de ser una leve llovizna, pero que no mojaba, lo que causó curiosidad entre mucha gente, en la zona donde vivo, cerca del centro, la lluvia de ceniza fue breve y muy tenue, no faltaron los medios de comunicación que quisieron dramatizar algo que simplemente se tendría que tomar como un hecho curioso cuyo principal “daño” fue el dejar cubiertos a los vehículos con una delgada capa de polvo gris.

Esto me ha hecho recordar la primera vez que la ceniza del volcán llegó a la ciudad, de hecho con la de ayer han sido solo dos veces, fue en julio de 1997, al llegar la nube al atardecer se extendió por toda la ciudad, fue una exhalación mucho mayor, llovía y la ceniza caía mezclada con el agua creando una extraña lluvia gris, al día siguiente las calles, árboles y vehículos estaban cubiertos de una fina capa de polvo gris, lo que siempre recordaré es como durante un par de días la ciudad tenía un leve aroma a azufre.

El volcán es continuamente monitoreado y en la página del CENAPRED hay imágenes del volcán pues tienen una cámara para vigilar su nivel de actividad.

Un recordatorio de que estamos a merced de la naturaleza

LA FAUNA DEL METRO

“¡Por favor señores! ¡Por favor escúchenme! ¡Nada les cuesta escucharme!”... Este es el grito estridente que con un sobresalto desconcierta al somnoliento pasaje de un medio vacío vagón del metro, un grito repetido tres veces; primero como súplica, después como demanda y finalmente en un tono francamente agresivo, procedente de un tipo malencarado, su larga plegaria llena de sentimentalismo barato destinada a abrir los bolsillos de los pasajeros y recitada en un tono muy agresivo se resume en estos puntos clave: “... tengo a mi hijo de 4 años internado en un hospital... padece de (nombra una enfermedad en forma poco comprensible y por lo tanto irrepetible)... hoy tiene que ser sometido a un estudio de (algo tan incompresible como el supuesto padecimiento)... el costo del estudio es de $12000 pesos, el gobierno me va a apoyar con la mitad, pero yo no tengo para completar el resto de la suma, solo traigo $10 pesos... tengo que juntar el dinero para hoy antes de las 3 de la tarde... ¡Escúchenme!... ¡Ayúdenme!

Hoy día pulula tanta gente en el transporte público pidiendo dinero fingiendo alguna dolencia, problema o lesión que uno ha terminado por no creer nada de estos pedigüeños, particularmente molestos me son los supuestos sordomudos que bien que escuchan y hablan, en el caso del sujeto gritón un par de puntos me hicieron ver que era una farsa; Que el gobierno le iba a pagar la mitad y que tenía que juntar el dinero antes de las tres de la tarde, pues esto me recordó que hace unos meses escuché la misma canción de otra persona, recitada prácticamente de la misma forma, pero no era necesario recordar esto pues la forma en que hablaba, con la seguridad que da el recitar un texto previamente memorizado, y el suplir la angustia y desesperación que tal problema podría provocar por simples gritos, hacen ver que estamos simplemente ante una (poco convincente) actuación. Pedir para centros de rehabilitación para minusválidos, albergues para enfermos de SIDA, obreros en huelga, la gama de peticiones en realmente muy vasta, pero siempre dicha con el mismo tono y la misma forma, solo cambian el objeto de la petición

¡Escúchenme señores! ¡Necesito su atención! Quiero irme de vacaciones pero necesito pagar mi boleto (de avión) antes del sábado, ¡Pero no tengo dinero! Además tengo que juntar para pagar hotel, comidas, bebidas alcohólicas, renta de auto, salto del bunjee, lancha con paracaídas, rollos fotográficos y videocasetes, compañía femenina y sus servicios... ¡como ven mi situación es desesperada! Así que... ¡Denme dinero! ¡Escúchenme! ¡Ayúdenme!

QUEEN AT WEMBLEY STADIUM

¡Estoy feliz! Y esta algarabía proviene de la adquisición del DVD del concierto de Queen en el estadio de Wembley... ¡es una maravilla! Sobre todo para aquellos que somos fanáticos de esta banda y cuyos temas nos traen muy gratos recuerdos.

El empaque contiene dos DVD, el primer disco con el concierto completo, el segundo de los dos ofrecidos por la banda, en el legendario estadio de Wembley en el marco de su gira “The Magic Tour ‘86” con sonido e imagen remasterizados hacen que la calidad sea excelente y la experiencia de verlo y escucharlo sea maravillosa. El segundo disco trae interesante material adicional como entrevistas con Brian May y Roger Taylor recordando el concierto con motivo del lanzamiento del DVD, algunas tomas del primer concierto que sirvió como ensayo para la filmación principal que se haría durante el concierto del siguiente día, un documental atrás del escenario donde se ve como llegan, se preparan y conviven con algunos de sus invitados como Mick Jagger, Elton John y Rod Stewart, además hay una curiosa filmación encontrada en la casa de un coleccionista de un informal ensayo de la banda, galería de fotos y para finalizar se incluye un corto que condensa en un par de minutos los trabajos de demolición de las torres del estadio de Wembley. Este concierto ya había salido en video VHS pero se eliminaron 57 minutos, ahora en DVD el concierto se muestra íntegro sin ningún corte, para su filmación se utilizaron 17 cámaras y un helicóptero.

El concierto en sí es magnífico, de hecho se considera aún hoy día como el más memorable que se haya efectuado en el estadio de Wembley, construyeron el escenario más grande de su época el cual nunca opacó a la banda, el desenvolvimiento escénico de Mercury y la forma en que manejaba a ésa increíble cantidad de gente es impresionante, Mercury improvisaba frecuentemente, pero esos cambios eran bien tomados por el resto del grupo, una vez escuché que Queen ha sido la única gran banda en la cual todos sus miembros obtuvieron un grado universitario en música, eso se nota en el escenario al ver su rápida adaptación a las improvisaciones pues tenían total libertad en los temas, ellos nunca buscaban reproducir el disco en el escenario, una cosa es en estudio y otra en directo. Una de las tomas más impresionantes es la de la gran cantidad de brazos en alto, palmeando al unísono el tema “Radio Ga Ga”, no recuerdo haber visto tan perfecta interacción entre banda y tanto público, su lema era “que se vayan sordos y ciegos, pero con ganas de más” y efectivamente uno no quisiera que acabara.

Pero no puedo terminar este tema sin retomar brevemente el de un post anterior donde hablaba de las coincidencias, y es que nuevamente ha sucedido algo, digamos que curioso: el DVD que he comentado lo compré el pasado viernes 11 de julio, ese día lo vi brevemente, el sábado 12 ya lo pude ver completo, fue hasta que vi el DVD con el material adicional que me enteré de las fechas de los conciertos de Queen en Wembley; ¡el viernes 11 y el sábado 12 de julio de 1986!

"QUEEN"

Freddie Mercury – Vocalista

John Deacon – Bajo

Roger Taylor – Bateria

Brian May – Guitarra

EL MENSAJERO DE DIOS

Metro Pantitlán, 7:30 p.m., de regreso a mi palaciega residencia después de haber pasado la tarde en el aeropuerto como cada sábado, de pronto se aproxima un señor de unos 60 años, apariencia desaliñada y cargando un costal lleno de objetos difíciles de identificar, el señor pregunta:

-“Buenas tardes, soy mensajero de Dios, ¿por donde voy para la estación Balbuena?”

-“De aquel lado hasta el fondo por las escaleras que van hacia abajo (la estación Pantitlán es un laberinto donde confluyen 4 líneas), por donde dice dirección Observatorio.”

-“¡Ah! Gracias, muy amable, ¡yo soy mensajero de Dios!”

-“Ah pues que bien”

Y continúo mi camino, y es que ante tan tajante y contundente afirmación, ¿qué más se puede decir?

EL SENTIDO DE LA VIDA

Lunes... ¡Que horrible día!
Ha sido un nada agradable inicio de semana.
¿Cuanto falta para el sábado?

OLORES

Al leer un reciente post de mí admirada Marian_Sad donde la pobre sufre por las emanaciones transpiratorias de individuos no muy afectos a la higiene personal, vinieron a mi memoria el recuerdo de olores realmente desagradables pero que curiosamente están muy ligados a momentos para mí muy agradables.

El nada delicado aroma de un chiquero, una porqueriza en donde los cerdos gozan revolcándose en el lodo y sus secreciones es algo que me revuelve el estómago, pero el recuerdo de esa nauseabunda sensación está ligado a otros recuerdos muy placenteros y entrañables; Cuando de pequeños durante las vacaciones de verano mi padre nos llevaba a recorrer las carreteras, iniciábamos con un par de destinos fijos pero muchos otros se iban agregando al avanzar nuestro recorrido pues no faltaba que dijera, “a ver a donde va este camino”, tal vez por esto no me atraen los grandes centros vacacionales, prefiero lugares menos conocidos y no atiborrados de turistas, y por lo tanto mucho más acogedores y disfrutables, el ir en el auto hacia un destino desconocido disfrutando de las maravillas de la naturaleza era para mí muy emocionante y aún sigue siendo algo que disfruto, un cambio radical donde quiera que le sendero nos llevara tomando en cuenta que veníamos de la ciudad más poblada del planeta, estos intensos viajes de una semana a veces nos conducía a tener que pasar por la ciudad de La Piedad (Estado de Michoacán), en este lugar una de sus principales actividades es la cría y engorda de cerdos, alrededor de la ciudad hay infinidad de granjas dedicadas a esta actividad lo que provoca que el ambiente en una amplia zona esté saturado de un horrible olor, nunca entramos a la ciudad, seguíamos de largo y a toda prisa huyendo del nauseabundo olor, me imagino que al nacer en esa ciudad deben de quedar “inmunes”, pero realmente me cuesta creer que no noten tan penetrante aroma, al pasar por el lugar recuerdo muy bien como disfrutaba del panorama compuesto por grandes extensiones de cultivos diversos, verdes lomas a lo lejos el cielo de un azul intenso y todo este bello paisaje enmarcado por un... ¡horrible olor!

Y mi ruta favorita también está marcada por una etapa con el olor más espantoso que pueda recordar, es el viaje desde la Ciudad de México hacia Yucatán que hacíamos en auto para ir a pasar los excesos de fin de año a Mérida, es una ruta maravillosa que nos lleva desde cimas nevadas hasta las playas del Caribe, pasando por bosques, praderas, selvas, viaje largo pues sin escalas se hace en unas 20 horas, todo es perfecto hasta que al pasar Veracruz la carretera dobla hacia el sur para bordear la costa del Golfo y se tiene que pasar junto a una gigantesca refinería que día y noche satura la atmósfera con sospechosos químicos cuya mezcla produce un olor difícil de definir pero fácil de describir: ¡mortalmente espantoso! Durante unos 10 kilómetros tenemos que sufrir por esta estela que todo lo impregna, cerrábamos las ventanas pero sentíamos que el olor se estancaba, las abríamos para ventilar un poco, pero solo entraba más apeste... ¡Qué horror! Pero pasando el punto el viaje regresaba a lo agradable.

¡Ah! También están los olores “bonitos” que en suficiente cantidad y con la mezcla adecuada también son mortales y en esto el Metro es una fuente inagotable, particularmente en las mañanas cuando la gente sale presurosa a sus labores, muy aseados, al menos en apariencia, pero emanando aromas de lociones, colonias, perfumes en tal cantidad que van dejando su estela a su paso, tal pareciera que en vez de agua usaron loción para bañarse, el punto culminante es cuando se apretujan en los vagones, esa mezcla de tan penetrantes y variadas esencias hacen de cada vagón un contenedor de armas químicas, ante tal agresión olfativa siento como mis fosas nasales se irritan hasta quedar al rojo vivo, dejando en mí el único deseo de escapar de esa trampa mortal y volver a la superficie a tomar una gran bocanada del bendito smog, tal avalancha de aromas me hace recordar un dicho de mi madre; “El que mucho huele, algo le apesta.”

DESPERTARES
Desde la semana pasada he estado teniendo sueños muy intensos, de ésos donde predominan los colores brillantes, que en mi caso son los que quedan más nítidamente grabados en mi memoria al despertar, los sueños han sido bastante curiosos, pero esta mañana me sucedió algo que no me había ocurrido en bastante tiempo y que no me agrada pues provoca que por unos segundos se confunda la división entre la realidad y lo onírico.

Estaba soñando algo que no recuerdo que era pero que sí recuerdo la sensación que me producía: inquietud, nerviosismo, y al despertar claramente recuerdo haber pensado; “Que bueno que desperté, eso se estaba convirtiendo en pesadilla”, y estaba por levantarme cuando me doy cuenta que... ¡ sigo en un sueño! En realidad no había despertado y en el momento de tomar conciencia de eso, me despierto finalmente.

Ése breve momento en que “despierto” y me doy cuenta que no lo estoy y que sigo soñando es lo que no me gusta pues me deja una sensación muy extraña, el estar al borde de la realidad y lo desconocido. La vez anterior que esto me había pasado fue hace unos 8 meses y ha sido la más intensa (en total me habrá sucedido en unas 5 ocasiones), ésa vez me “despertaba” y segundos después por una extraña sensación me daba cuenta que seguía en otro sueño, al darme cuenta de esto me volvía a “despertar”, pero hacia otro sueño, en una de ésas veces estaba tan convencido que finalmente me había despertado que siento como me levanto de la cama, pues ya era hora de hacerlo, y al dar un par de pasos siento que en realidad sigo dormido, en total me habré “despertado” unas 4 veces, hasta que finalmente me despierto conciente de que por fin estaba realmente fuera de los sueños. Al menos el de esta mañana fue un solo “despertar”.

He escuchado hablar del “sueño lúcido”, no estoy muy enterado en el tema pero en forma muy general sé que se trata de que al estar soñando y tomar conciencia de nuestra realidad dentro del sueño, es decir, que estamos concientes que es un sueño, entonces podríamos tener el control de nuestros sueños y manipularlos a voluntad, de la forma que más nos plazca, y por lo tanto no habría limites en lo que quisiéramos hacer. No sé que tan posible pueda ser esto, pero esos “despertares” a otros sueños y estar conciente de ellos al menos por breves momentos, me hace preguntarme si acaso he estado al borde de un “sueño lúcido”.

¿CASUALIDAD, COINCIDENCIA... PREMONICIÓN?

No hace mucho tiempo que he notado como a lo largo de mi vida se suceden, mas o menos periódicamente, ciertos eventos que podría calificar de simples coincidencias, pero al ver que han sido algo inusuales, pues simplemente me pone a pensar.
Lo que sucede es lo siguiente; cuando a mi mente viene el recuerdo o imagen de cierta persona, cosa o evento, dos o tres días después veo a ésa persona o evento, no hablo de sueños sino de pensamientos que de pronto cruzan por mi mente, pero son pensamientos espontáneos que aparecen inconscientemente, si trato de hacerlo de forma consciente, simplemente no pasa nada, pero siempre han sido cosas muy triviales, por ejemplo; si de pronto me acuerdo de algún capítulo de “Los Simpsons” que me gustó y hace tiempo no lo repiten, dos días después lo pasan, si recuerdo haber leído hace tiempo algún artículo que me gustó, dos o tres días después vuelvo a leer un artículo similar en otra revista, o más recientemente luego de poner mi post sobre la película de Jim Carrey, al siguiente fin de semana pasaron un maratón de tres películas de Carrey, y por supuesto que yo no tenía la menor idea sobre la programación de ése canal, así como lo ven son cosas sin importancia, simplemente anecdóticas, pero que se han sucedido con cierta frecuencia, pero hay un caso que en su momento me pareció solo una gran casualidad, pero ahora que lo he analizado mejor no deja de sorprenderme, el asunto es este:

Hace unos años mi amiga Danijela me contaba que le habían dicho cual era su color de aura y ella quería saber si tenía algún significado, así pues me preguntaba si por casualidad yo sabía algo sobre el tema, sí yo he leído sobre el aura pero acerca del significado para cada color yo no tenía la más mínima idea, tres días después sentado en el Metro de reojo veo que la persona a mi lado leía un libro acerca del aura y estaba abierto en la página donde había una tabla que mostraba cada color y su significado, es ése momento dije: “¡que casualidad!” pero ahora, 4 años después lo analizo y no salgo de mi asombro al ver la gran cantidad de conexiones que tuvieron que coincidir para que ésa “casualidad” se produjera, así pues veamos...

Sin duda el Metro es el medio de transporte público más usado en al Ciudad de México, me parece haber escuchado que transporta a más de 4 millones de personas diariamente, la “casualidad” se produjo en la Línea 1 que con 20 estaciones es una de las más concurridas de las 11 líneas que forman la red del Metro, esta línea es recorrida por aproximadamente 40 trenes, cada tren tiene 9 vagones y cada vagón 4 puertas para abordarlo, los trenes pasan, o deberían de hacerlo, cada 4 o 5 minutos, así pues de entre todos ésos trenes tuve que llegar al andén a la hora exacta, para abordar un tren en particular, en el vagón indicado, por la puerta correcta, para que entre los 39 asientos del vagón sentarme junto a la persona de entre los 20 millones que vivimos en el área metropolitana, que leía un libro de unas 100 páginas sobre el aura y que en ése momento lo tenía abierto en la página donde daban el color y significado para cada uno, así tuve la respuesta a una pregunta hecha hace tres días, en ése momento dije “¡que casualidad!”. Ahora al analizar todos estos factores solo puedo decir... ¡Oh Dios! ¿Qué fue eso?